SANTO DOMINGO.- El Servicio Secreto de Estados Unidos aclaró ayer que fueron agentes de esa agencia, asignados a la seguridad del presidente Leonel Fernández, quienes se acercaron al mandatario para preguntarle si deseaba ocupar otros asientos durante un juego en el estadio de los Yanquis de Nueva York, por si los que tenían él y su comitiva asignados no eran de su agrado.
La aclaración la hizo el oficial James Mckain, jefe de la jurisdicción de Nueva York que asignó los agentes para la seguridad y protección del presidente Fernández, según una publicación del periódico Nuevo Horizonte.
La información, firmada por la periodista Margarita Canahuate, señala que el oficial Mckain afirmó que el alegado incidente donde supuestamente tres fanáticos lograron pasar sin contratiempo la seguridad asignada al presidente dominicano en el estadio de los Yanquis, no era del conocimiento de su agencia.
Los fanáticos, según informaron algunos medios de prensa, alegadamente reclamaron que el presidente Fernández se había sentado en las butacas que les correspondían. Pero aparentemente esto no sucedió, según las declaraciones del oficial.
Mckain explicó que al presidente dominicano se le habían asignado asientos específicos junto a su comitiva, pero que éstos estaban separados. Agregó que después de lanzar la primera bola, el Presidente ocupó su asiento, y “entonces agentes asignados a su seguridad se le acercaron para preguntarle si deseaba ocupar otros asientos”. Según el oficial, Fernández rechazó la oferta, aparentemente porque se encontraba cómodo donde estaba sentado.
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